Seré honesta con ustedes, si hubiese sabido de que se trabajaba no habría pagado por irla a ver. Estoy un poco fastidiada de las historias sobre extraterrestre “monstruos” que nos han metido en la cabeza desde los años 60. Pienso que quien quiera hacer una película de ciencia ficción sobre el tema, debe investigar muy bien las nuevas temáticas, análisis y estudios que se están llevando a cabo y no tomárselo tan a la ligera como lo hicieron en Arrival.
La película es bastante lenta, y comienza con la “visita” de doce naves espaciales a varios lugares del mundo. En cada país intentan hacer contacto con los seres que viven en la nave. Sorprendentemente, solo el personaje de Amy Adams, quien interpreta a una experta linguista, logra hacer avances y descifrar el idioma de estos seres extraños, a quienes presentan como monstruos de múltiples patas.
Lo único que se les agradece es que no llevaran la trama a la amenaza que representan los extraterrestre para los humanos y que solo quieren absorber la materia prima del planeta Tierra (Indepence Day style). Esta vez, decidieron dejarlos “buenos” y con un mensaje positivo para la humanidad.
Pienso, dejaron lo mejor para el final y lo tocaron muy superficialmente. El climax pudo haberse desarrollado durante más tiempo para lograr ver un poco más de la verdadera reflexión que quería dejar la película.
La actuación de Amy Adams bastante floja. En líneas generales me dejó un sin sabor. Entiendo que está basada en el libro Story of Your Life de Ted Chiang, pero siento que hay tantas tendencias nuevas e investigaciones sobre este tema que, sinceramente, me pareció una más del montón. Por lo que no entiendo hasta ahora sus aclamadas reseñas y su alto número de críticas positivas en reconocidos sites cinéfilos. Anyways, véala usted y saque su propia conclusión. Mandy Off.